Corriente de ADP dice estudio PISA desmiente “revolución educativa”

Sixto Gabín

Santo Domingo.-L a corriente de la Asociación Dominicana de Profesores (ADP) Espacio Magisterial Narciso González afirmó que los resultados de la Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos ( Pisa) desmienten la revolución educativa que el Gobierno dice ejecuta en el sector educativo revelan que solo se queda en discursos.
   
El profesor Sixto Gabín, coordinador de la corriente, señaló que hace tiempo advirtieron al Ministerio de Educación la necesidad de la inversión en los recursos humanos, así como en los programas educativos que posibiliten trabajar en la calidad educativa desde una visión democrática, como lo establece la Ley General de Educación.
   
“La concentración del 4% en varilla y cemento sin combinarla con los demás componentes del sistema educativo constituye una visión reduccionista de la política educativa, además de la presencia del fenómeno de la corrupción en dichas obras”, agregó.
   
El dirigente no negó que existan debilidades en el seno del magisterio, pero indicó que resaltan mucho más sus fortalezas y que el Ministerio de Educación tiene 10 años sin evaluarlo.
   
Expresó que ha fracasado la política de corte neoliberal en el sector educativo, ya que al Gobierno no le interesa formar ciudadanos críticos, si no que más bien concibe la educación como un producto al servicio de la política de privatización y del negocio.

USAID dona $900,000 para pequeñas iniciativas comunitarias de planificación para adaptación climática en Santiago

 Para aumentar las capacidades de resiliencia ante los impactos del cambio climático y fortalecer los mecanismos de acción comunitaria ante los mismos

SANTIAGO. El Gobierno de los Estados Unidos a través de su Agencia para el Desarrollo Internacional (USAID) realizó donaciones al Centro Integral para el Desarrollo Local (CIDEL) y la Asociación para el Desarrollo Comunidad Unidad de Cienfuegos (ADECUCI) por un valor de más de RD$900,000. El objetivo de estas donaciones es incrementar la participación de organizaciones locales en los procesos de planificación municipal de uso de suelo inclusive de adaptación al cambio climático y procesos de participación ciudadana.

Las donaciones fueron otorgadas en el marco del Programa de Planificación para la Adaptación Climática, implementado por la International City/Council Management Association (ICMA). La donación al CIDEL fue RD$460,000 para establecer una mesa de discusión sobre resiliencia y cambio climático en las comunidades vulnerables de Santiago. Además el CIDEL capacitará las redes de organizaciones de la sociedad civil y promoverá la articulación entre las mismas para la movilización de la ciudadanía en relación a los procesos de planificación y ordenamiento del territorio. El CIDEL realizará un estudio de la situación de vulnerabilidad y generar espacios de conocimiento sobre resiliencia y Cambio Climático en el Municipio de Santiago. Adicionalmente hará incidencia para que la inversión municipal decidida por las comunidades a través del Presupuesto Participativo Municipal y ejecutada por el Ayuntamiento de Santiago responda a las necesidades de adaptación al cambio climático.

Por otro lado, la donación a la ADECUCI fue de RD$459,061 para desarrollar las capacidades de adaptación al cambio climático mediante acciones de prevención, organización y concientización a los habitantes de Cienfuegos.

Sobre el Programa de Planificación para la Adaptación Climática

El programa inició en marzo 2015 y cuenta con un presupuesto de US$6.7 millones, cuyo principal objetivo es mejorar la resiliencia de las comunidades dominicanas a través de integrar la adaptación al cambio climático en los procesos de planificación y ordenamiento de uso del suelo. Además busca promover modelos de desarrollo que se puedan sostener a nivel local y que sean replicados en todo el país a través del tiempo por lo que se implementa junto a los ayuntamientos de los municipios involucrados: Las Terrenas, San Pedro de Macorís, Santiago y el Distrito Nacional, y conjuntamente con la Federación Dominicana de Municipios (FEDOMU), el Instituto Tecnológico de Santo Domingo (INTEC), ICF International, así como con el apoyo del Consejo para el Desarrollo Estratégico de la Ciudad y el Municipio de Santiago (CDES).

Durante más de cinco décadas en el país, la USAID, en estrecha colaboración con el pueblo y el gobierno dominicano, ha contribuido con el desarrollo sostenible y el fortalecimiento de instituciones dominicanas en los sectores de salud, economía, gobernabilidad, justicia, sociedad civil y educación. A la fecha, la USAID ha invertido más de US$1,700 millones en la República Dominicana.

Deficiencias de la escuela dominicana, ¿De quién es la culpa?

Por: José Jáquez

La escuela dominicana forma a la mayoría de  los profesionales y técnicos que ocupan lugares en el mercado laboral para puestos calificados. Se ha dicho siempre, con toda razón que por la mano del maestro y la maestra pasan desde secretarias hasta el gerente, desde el regidor hasta el presidente del estado. Se cuestiona, sin embargo, el trabajo del docente y las universidades hacen grandes esfuerzos para descubrir donde radica el punto en centro del problema.

La escuela pública paso por dos grandes crisis, en 1989 y en 1991, en las cuales las aulas fueron  cerradas por la         Asociación Dominicana de Profesores en que el gobierno no apoyaba la educación. La presión nacional traspaso las fronteras y consiguió la solidaridad internacional hasta de la Organización Internacional de trabajo OIT. Fueron convocados todos los sectores de la vida nacional, es decir, empresarios, iglesias, gobierno, organizaciones no gubernamentales, centrales sindicales, entre otros.

Los trabajos en equipo dieron como  resultados  el Primer Plan Nacional de Educación, el cual inició en 1992, y en poco tiempo logro rescatar la imagen de la educación pública. Miles de familias de la vida urbana que sacrificaban su comida para pagar un colegio regresaron sus hijos a las escuelas. Las aulas de los centros educativos en las grandes ciudades no alcanzaban para dar respuesta a la gran demanda.  

Esa mejora de la imagen de la escuela trajo consigo otras mejoras tanto para los centros educativos como para estudiantes y profesores. Mayor inversión permitió libros de textos, materiales para el quehacer pedagógico, apoyo a la capacitación de los docentes, mejores salarios para el personal, una nueva ley general de educación,  más claridad en los renglones para el retiro o jubilación, entre otros.

Ante todo lo descrito anteriormente, y vista las evaluaciones hechas en las que   la educación dominicana sale mal parada en lecto escritura, interpretación, ciencias, se obliga a las siguientes interrogantes: ¿Qué le ha pasado a la escuela dominicana? ¿Será  cierto que estamos tan mal en aspectos tan básicos? ¿Quién es culpable de esta vergonzante situación de nuestra escuela? Y otros cientos de preguntas que sabemos tendrá usted al leer estas. Hay que continuar buscando.

El autor es profesor