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sábado, 12 de mayo de 2018

El mensaje que mandan los males sociales


 
Por: Ramón Antonio Veras.
 
I.- Quebrantos sociales notorios
 
1.- A veces, el ajetreo diario procurando enfrentar problemas de toda índole nos impide detenernos a pensar en asuntos de suma importancia. El trajinar nos lleva a ver cuestiones de envergadura, como insignificancias, hasta que poco a poco nos formamos la idea de que cada problema social es pura tontería, nimiedades. Pero las muchas ocupaciones no deben servir de motivo para llevarnos a la pasividad y convertirnos en apáticos que nada nos conmueve.
 
2.- Nada justifica que un ser humano se manifieste despreocupado o simplemente se convierta en un flemático para no hacerle frente a una situación que debe impulsar al asombro y a la búsqueda de solución. Todo aquello que de una u otra forma lesiona a las personas físicas debe motivar preocupación en los hombres y las mujeres que llenos de entusiasmo están llamados a enfrentar los males sociales.
 
3.- El estado de bienestar material; el disfrute de la riqueza; la prosperidad manifiesta y la holgura no impiden al individuo sensible comprender la necesidad de colocarse allí donde las circunstancias le mandan a estar al lado de los menesterosos.
 
4.- Por muy encantadora que se le presente la existencia a una minoría insignificante de la sociedad, el estado desgarrador que vive la gran mayoría del pueblo debe impulsar a la modificación del statu quo asfixiante para los que permanecen en condiciones insufribles. El bienestar social no se mide por la aprobación de bonanza que proclaman aquellos que creen que el mundo es el estrecho círculo donde se mueven, olvidando que a su alrededor está toda una población llena de miseria.
 
5.- De la misma forma que 7 ml de sangre sirven para comprobar el estado de todo el torrente sanguíneo del cuerpo humano, los hechos degradantes constantes ocurridos en un medio social sirven para identificar la descomposición existente. Algo anda mal allí donde se combina una gran masa de pobretones de todas edades y la enorme opulencia de un pequeño grupo.
 
6.- Las muchas dolencias, las expresiones de desánimo, las molestias continuas en el organismo de un individuo son síntomas que mandan mensajes de una o varias enfermedades. Los asomos de que no andamos bien son anuncios de que necesitamos ser tratados por un médico a los fines de que nos examine y de ser necesario prescriba los medicamentos, o nos someta a una intervención quirúrgica.
 
7.- La especie humana sufre de quebrantos que no requieren de exámenes profundos ni de la intervención de conocedores de las ciencias médicas. En ocasiones hasta un brujo, un curandero cualquiera, sabe lo que aqueja al paciente, porque la lesión está a la vista y el enfermo no necesita una amplia consulta, el envío de muestras al laboratorio ni la intervención de imágenes.
 
II.- La sociedad aquejada por enfermedades sistémicas
 
8.- La sociedad dominicana está aquejada de toda una serie de achaques que para comprobarlos no hay que ser un gran conocedor de las taras que colocan a un ordenamiento económico y social en situación de enfermo que manda una atención urgente porque está tocado en varios de sus órganos vitales. Las lacras que a diario vemos nos dicen que estamos en un medio que reclama cuidados profundos y de inmediato.
 
9.- Lo que dice la realidad dominicana es que el cuerpo social del país está sufriendo de diferentes quebrantos que imponen una actuación rápida, porque las afecciones son de una variedad tal que deben llevar preocupación hasta a los más aprovechados del sistema. Aunque no se conoce el origen de la patología, los signos que se observan hacen suponer que los trastornos en los órganos dañados son sumamente graves.
 
10.- El ordenamiento económico y social predominante aquí, por su propia naturaleza es enfermoso, lo que se evidencia por las contradicciones internas que lo hacen malo de por sí, y al descansar en la desigualdad trae como consecuencia enfermedades tales como injusticia, discriminación, imposibilidad de desarrollo humano integral y fenómenos dañinos que le son inherentes como pobreza, desempleo, analfabetismo, insalubridad, prostitución, corrupción, criminalidad, odio y otras taras semejantes.
 
11.- El sistema está convertido en un paciente que motiva irritación en amplios sectores de la población dominicana llevándoles a perder la paciencia; a estar fuera de sí; hacerles saltar y moverse de un lado a otro ahítos de rabia. Las enfermedades de que adolece el modelo llevan al acaloramiento; a perder los estribos y hasta hariscarse al más tranquilo. De ahí el encabronamiento que cada día más enfurece a dominicanos y a dominicanas.
 
12.- Las enfermedades que ocasiona el cuerpo social dominicano mantiene a la generalidad de los dominicanos viviendo en condición delicada y con expresiones que les presenta enclenque, con signos de malmarriento. El rostro escolimado de una gran mayoría de los nuestros es un claro reflejo de que de tanto ponerse enfermo se supone tiene un tumor maligno que ha hecho metástasis porque las dolencias se han reproducido en distintos órganos. Es posible que no sea muy difícil la identificación de los tumores alojados en la masa corporal que constituye la sociedad dominicana.
 
13.- El hecho de que la familia está agrietada revela que el sistema en el cual está sustentada la sociedad dominicana no goza de buena salud. Sin ser un especialista de la medicina social se advierte que si la principal célula -el órgano familiar-, demuestra estar decaída, los otros miembros también carecen de la cualidad de sano.
 
14.- Las dificultades que aquí a diario ocurren en grupos emparentadas entre si nos indican que estamos viviendo una etapa complicada. Hechos sumamente lamentables que se dan entre consanguíneos, sirven para marcar como calamitoso a todo el medio social dominicano. Son habituales los conflictos entre parientes, extendiéndose a acciones escenificadas de padres a hijos y de esposos a esposas. Un cuerpo social comienza a exhibir sus enfermedades desde los hogares, y precisamente es ahí donde las estamos presenciando.
 
15.- Ese mal que comprobamos en la familia dominicana, en igual sentido lo confirmamos cuando somos testigos de que aquí el 61 por ciento de los niños de 6 a 11 meses padece anemia, y al constatar que la mortalidad infantil experimenta un aumento del 31.9 por ciento interanual, y en lo que va de 2018 el número de los infantes muertos asciende a 793. Estos datos nos dicen con claridad que el cuerpo social dominicano no está en condiciones de salubridad, que está insano y que, aunque sus defensores quieren presentarlo como una manzana, la realidad evidencia que está huero. 
 
16.- La mortalidad infantil no es el único signo que caracteriza el nivel de enfermedad del modelo económico fallido que aquí impera. Son muchas las lacras que revelan lo lesionado que está el cuerpo social que lo único que ofrece es intranquilidad permanente; desasosiego espiritual; desazón y proliferación de malestar colectivo. La nocividad que padecemos es sistémica, y la salubridad no se desarrolla en cuerpos moribundos.
 
17.- El cuerpo social bajo el cual estamos viviendo está convertido en una podredumbre; una carroña que por cualquier parte que se toca bota pus con secreciones de diferentes colores, pero siempre con malos olores que hacen la hediondez inaguantable. Un órgano tiene que estar muy deteriorado para un hijo dar bofetadas a su anciano progenitor; un nieto violar a su abuela; un hermano paga sicarios para que asesinen a su pariente por diferencias económicas; la conducta ética sexual de los sacerdotes preocupa a su iglesia. La purulencia que emana del sistema que padecemos es prueba de que la putridez con el tiempo se torna insoportable.
 
18.- No hay que visitar centros médicos internacionales muy acreditados para conocer lo insanable que se encuentra un enfermo en condición terminal. Males como narcotráfico, sicariato, parricidio, infanticidio, asaltos, atracos, violaciones sexuales a menores de edad y toda una variedad de crímenes agravados y teñidos de sangre solo ocurren en un medio que se manifiesta inmedicable.
 
19.- La descomposición a que ha llegado el actual modelo económico y social, cada vez manda señales de que para las grandes mayorías nacionales está preñado de nocividad y por más que se quiera someter a curación sus lesiones lo hacen insalvable. Es insano un sistema que no estimula la honestidad; fomenta la desigualdad de oportunidades; genera lacras de diferente naturaleza; desprotege a los niños y a los ancianos; descuida el servicio de salud y el educativo; desabriga el medio ambiente, y hace posible la criminalidad, la violencia y el odio.
 
 
III.- La gravedad de los males sociales nos debe preocupar
 
20.- En un ambiente enfermo no es posible vivir con tranquilidad espiritual porque las lesiones traen el malestar que mantiene alterado el ánimo, crea agitación y alarma continuamente a la comunidad. Los quebrantos siembran en la conciencia la intolerancia, el fanatismo y el apasionamiento que conduce a la permanente discordia. Los males sociales hacen la vida en sociedad inadmisible, indignante y vergonzosa, porque allí donde predominan estructuras rígidas el medio se intoxica por el veneno de la maldad que corrompe hasta los nobles sentimientos que se anidan en el cerebro del ser humano excelente.
 
21.- Para conocer la gravedad en que se encuentra el escenario donde a diario hacemos vida social, solamente hay que despojarse de fanatismo político e ideológico y armarse de ecuanimidad. La realidad nos está diciendo que un cuerpo social tiene que estar enfermo para poder contar en su seno con personas que con su proceder demuestran que están desprovistas de sentido humano y compasivo, y que en ellas ha prendido la crueldad, la insensibilidad y la atrocidad.
 
22.- El mensaje que nos traen a diario los hechos que ocurren en el país y nos causan repugnancia, es que debemos de hacer una interrupción por el camino que vamos, para reflexionar con detenimiento y razonar en el sentido de que no debemos continuar viviendo como hasta ahora, que estamos en un lodazal, en una especie de pocilga.
 
23.- Acomodarse a permanecer aceptando lo peor no es lo normal en una comunidad de mujeres y hombres que luchan por construir un país en el cual la capacidad y el trabajo sean las condiciones que deben adornar a los miembros más sobresalientes. Los males sociales presentes en el país son la consecuencia directa de un ordenamiento económico y social que ya no da para más, y adolece de tachas que lo hacen inservible.
 
24.- Nuestro país cuenta con fuerzas motrices interesadas en cambiar el statu quo que ya cumplió su vigencia histórica y se mantiene achacoso, enfermizo permanentemente. Se impone crear un sistema que haga posible la existencia de un cuerpo sano, salutífero; que sea vigoroso; muy reluciente, y se vea rozagante, enteramente lustroso. Un cambio para lo bueno y sano es posible.
 

martes, 8 de mayo de 2018

Preocupante la deficiencia en la educación









Por: Ramón Antonio Veras.
 
I.- Miseria en la educación. Fallas en el sistema y en los profesores 
 
1.- Tengo un deseo inmenso por escribir sobre los logros de mi país en la educación, porque creo que es la base para salir adelante, pero por mas afición de ánimo que tengo, la realidad me da en la cara cuando compruebo que a lo que aspiro en el orden educativo por ahora no es más que una esperanza atractiva pero infundada.
 
2.- Contento me sentiría si mis conciudadanos sobresalen en cualquier competencia que participan siendo el tema de la rivalidad relacionado con la instrucción que reciben a nivel primario, intermedio, secundario o universitario. Pero la alegría que quisiera disfrutar se frustra una vez certifico que en cualquier concurso los nuestros sobresalen, no por la buena formación escolar, sino por la deficiente preparación educativa que exhiben.
 
3.-  La miseria nuestra en educación está, no solo en los niños, sino también en los adultos, lo que prueba que la falla es sistémica, no de particularidades. El hecho de carecer nuestros coterráneos de aptitud en lo educativo  no quiere decir que sean unos tarados, sino que la falta está en el material humano encargado de enseñar.
 
4.- Es evidente que no se está aplicando correctamente el conjunto ordenado de reglas y principios indispensables para que los alumnos asimilen lo que se les transmite  y adquieran los conocimientos relacionados con la materia. En el estudiante no basta el talento, sino también precisa  de quién le orienta adecuadamente para que entienda lo que se quiere que asimile.
 
5.- Si el profesor no explica con destreza la clase que imparte, es porque le falta capacidad; demuestra que no  posee la presteza  que debe acompañar a quien tiene la misión de ser productivo en la enseñanza. Aquel que no tiene el don de instruir, echa por tierra y lleva al desencanto al estudiante más talentoso. Muchas veces la desilusión de un joven estudiante es el resultado de la falta de motivación de parte de su instructor que evidencia así no tener dominio para proporcionar conocimientos científicos o prácticos.
 
6.-  Lo que exhibe el estudiante o el profesional de un país cualquiera es la fiel expresión del sistema educativo y la capacidad para enseñar de los profesores.  Si lo que presentamos como ciudadanas y ciudadanos bien educados luego resultan ser un engaño, un disimulo, no hay duda que la falsía es responsabilidad del sistema y sus ejecutores que han producido una falsedad fruto de la falla en la doctrina y el que la practica.
 
7.-  El que tiene por encargo  educar se eleva ante sus discípulos cuando les pone en condición  de entender las explicaciones que les hace.  El que labora como maestro debe ser un verdadero conocedor de lo que aspira sea asumido por el que hace de estudiante, y demuestra luego haber sido aplicado porque bien asimiló lo que le transmitió su educador. Prepararse es el resultado de la combinación de un buen maestro y de un diligente estudiante.
 
8.-  Aquel  que decide ser maestro  previamente debe formarse la idea que va a dedicarse a una actividad que exige, además de preparación intelectual,  empleo a fondo para brindarle un servicio a la sociedad sin pensar en la remuneración económica. El que hace de la enseñanza  un trabajo habitual con entusiasmo está  respondiendo a una inspiración; a algo que le motiva respuesta a un  llamado a  cumplir por vocación.
 
9.- Cada quien debe saber si está obrando en forma apropiada o, por el contrario, ejecutando en forma  inexacta. Conviene proceder a rectificar una vez se confirma, en los hechos, que no se está actuando conforme a las reglas que impone la disciplina. Corregir  es una decisión prudente cuando no se logra el objetivo perseguido.   En el caso  específico de la educación en nuestro país, la realidad está diciendo que procede parar, detenerse a analizar el sistema educativo que se está practicando, así como los profesores que tienen la misión de llevarlo a las aulas para implementarlo ante los alumnos.
 
10.- Maestro es sinónimo de entrega cuando lo demuestra ejecutando en forma consagrada. Asistir a las aulas a cumplir un horario por formalismo y ventaja económica, no es más que pura simulación para hacer creer generosidad donde solo hay ventajismo. La dedicación se ve materializada  por el éxito alcanzado, y en el caso de los profesores se comprueba por los triunfos que llegan a obtener sus alumnos. La acreditación de aquel que enseña está en la aprobación que recibe de sus discípulos.
 
11.-  Debe  ser un objetivo a alcanzar  por la gente buena de nuestro país ser avanzados, por lo menos entre los iguales en desarrollo económico y social, superando las dificultades que nos lesionan en lo más profundo como comunidad que aspira salir adelante en el concierto de naciones civilizadas. La preparación escolar excelente a la niñez de hoy sería posible con un sistema de enseñanza que permita, con maestros  debidamente calificados, allanar el camino que nos llevaría a eliminar los tropiezos que hemos dado en la educación. Se impone romper con todo aquello que nos ha llevado al atolladero que nos lamentamos tener en todo lo que se refiere a formación y aprendizaje en general.
 
12.- No son aislados los casos  que están ocurriendo que ponen en entredicho la efectividad de las normas y principios que aquí rigen el sistema de enseñanza. La sospecha de la ineficacia de la educación se ha convertido en una certidumbre, y la presunción de falla en la enseñanza ya es algo fuera de toda duda.
 
13.- Se hace necesario que nuestro país cuente con ciudadanas  y ciudadanos que logren descollar en las ciencias y la cultura; sobresalir por una fina formación académica; despuntar por ser seres humanos distinguidos por su don de dominar las diferentes disciplinas de la enseñanza, en fin, los nuestros están en la obligación de probar tener cerebros  cultivados  por excelentes pedagogos. Se impone formar personas físicas identificadas como paradigmas de los que enseñan a aprender y señalan la pauta de lo que debe ser emulado para superarlo.
 
II.- Las malas estadísticas nos condenan
 
14.- Lamentamos estar lejos de lo que es nuestro legítimo deseo de ser un país  que se destaque como excelente. Los datos que nos llegan de las distintas actividades donde estamos presentes no son muy halagüeños como se advierte   por las siguientes informaciones.
 
a.-  Crisis de aprendizaje. Aquí no se ha tomado en cuenta  la grave situación por la que está atravesando  todo lo relacionado con el tiempo durante el cual el ser humano aprende. El aprendizaje inquieta tanto que figura como  punto feo de nuestro sistema educativo,  llegando a ser calificado como “dentro de la crisis de aprendizaje que se refleja en los bajos resultados en las pruebas  diagnósticas nacionales e internacionales, llegando a ocupar el último lugar. La escolarización  sin aprendizaje impactará las posibilidades de crecimiento  de toda la economía  en el largo plazo,  aunque la República Dominicana  tiene la oportunidad de hacer del aprendizaje el objetivo central de las reformas  del sistema educativo”.[i]
 
b.- En matemática y ciencia Si bien no todos los países en desarrollo muestran deficiencias tan extremas, muchos están aún muy lejos de los niveles que aspiran a alcanzar. Según el Estudio Internacional de Progreso en Comprensión Lectora  y el Estudio Internacional de Tendencias en Matemática y Ciencias, el estudiante promedio de los países de ingreso bajo tiene peor desempeño que el 95 % de los estudiantes de los países de ingreso alto, es decir, ese niño recibiría atención especial si concurriera a una escuela de un país de ingreso alto. Muchos alumnos con buen desempeño de los países de ingreso mediano, se ubicarían en el cuartil inferior si estuvieran en un país más rico. En Argelia, Kosovo y la República Dominicana, el puntaje que delimita el cuartil de mejor desempeño de los estudiantes que participan de las pruebas, se ubica muy por debajo del puntaje que define el último cuartil de los alumnos en los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos. Aun en Costa Rica, país con resultados relativamente buenos en educación, el puntaje de corte para los alumnos del cuartil más alto es igual al del cuartil más bajo de Alemania.[ii]
 
c.- La mala educación daña la salud. Está en crisis. El sistema educativo de la República Dominicana se encuentra en crisis. Un deterioro que no sólo afecta al desarrollo económico de la población sino también a uno de sus pilares más importantes: la salud. La República Dominicana tiene 40 mil estudiantes de medicina en las diferentes universidades, de esos, solo 4,000 se gradúan cada año. De los que logran graduarse, pocos entran a residencias locales e internacionales, debido su nivel de formación académica.

d.- Los datos. En el 2013, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) reveló que en el país había 15.4 médicos por cada diez mil habitantes y que la meta era llegar a 25 por cada diez mil; es decir, que existía un déficit de 10 médicos por cada 10,000 habitantes ese año. Según los resultados del Programa de Evaluación para Estudiantes Internacionales (PISA), de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OECD), la deficiencia de la educación en República Dominicana ocupa la última posición en ciencias de los 69 países evaluados, mediante una encuesta que prueba las habilidades de conocimiento en adolescentes de 15 años. Estas carencias en el sistema educativo desde la etapa escolar, pasando a la universitaria, también se extrapola a los estudios de postgrado, lo que incide significativamente en la atención hospitalaria y el cuidado de la salud.  “No solo se trata de los datos revelados por el PISA. Otro indicador se refleja en respetables rankings de calidad académica, donde nuestras universidades están por debajo de la número 4,000, en el mundo, y después de la 100 en Latinoamérica”.[iii]
 
e.- Pobreza en investigación agropecuaria: República Dominicana es uno de los países de América Latina que posee menor cantidad de investigadores agropecuarios con especialidad de doctorados o PHD, situación que repercute en los niveles de su producción. Hasta abril de 2016 había 20 mil 368 profesionales realizando investigaciones agropecuarias en América Latina y el Caribe, pero República Dominicana solo cuenta con 200 profesionales especializados, lo que representa un 0.98 % del total regional.[iv]
 

miércoles, 2 de mayo de 2018

Periodistas cubanos disertan sobre Periodismo digital en Santiago Oeste.









Dos periodistas cubanos disertaron antes los estudiantes del Politécnico Víctor Manuel Espaillat sobre el papel de los medios de comunicación en la era digital. Los Periodistas Inelvis Miranda e Israel Hernández se refirieron a la facilidad que ofrecen los medios de internet y la responsabilidad de los usuarios.



El Periodista y Profesor  universitario Israel Hernández intercambió con los estudiantes sobre imágenes que suben en sus redes sociales y la facilidad para hacerlo. Lo importante, según explica el catedrático es la intención y los objetivos que se persiguen con las publicaciones.



La profesora Inelvis Miranda, en su turno ante los alumnos afirmó que los usuarios de las redes sociales deben tomar en cuenta mensajes con valores enfocados en la educación y las sanas costumbres de las familias y la sociedad. Expresó la profesional que toda persona que vaya a colgar un mensaje o una imagen en internet deben medir las consecuencias que ello conlleva.



Ambos periodistas enfatizaron sobre  la necesidad individual de establecer un control del contenido a publicar en sus redes, pues lo que cada uno interesa no necesariamente interesa a la sociedad. Tanto Israel Hernández como Inelvis Miranda resaltaron la importante de las zonas wifi que se han establecido en su país, lo que permite el uso público y sin costos a los ciudadanos.



El encuentro con los periodistas de Cuba fue organizado por el Comité Santiago Oeste Municipio, la Fundación Informática y Desarrollo, la seccional de Santiago del Colegio Dominicano de Periodistas en coordinación con el Politécnico Víctor Manuel Espaillat.



En la mesa central del acto estuvieron el Lic. José David Báez, Secretario General de Santiago Oeste y  Director del Politécnico, Lic. Hipólito Martínez y el Profesor José Jáquez, presidentes colegiados de Santiago Oeste, y los dirigentes Eleodoro Pérez, Claudio Alcántara y Susana Mercado Guzmán. El acto contó con la presencia de los profesores del Politécnico Víctor Manuel Espaillat,  Mario Mora, Jose Rodríguez, María Domínguez,  Marie Lenin, Sandro Eusebio, Isolina de La Rosa, Elsi María Báez,  y Fernando Durán.

Cámara de Comercio y Producción de La Vega y Conep analizan panorama económico y empresarial para 2023

La Vega. La Cámara de Comercio y Producción de La Vega y el Consejo Nacional de Empresas Privadas (Conep) ven como esperanzador y optimista ...