SANTO DOMINGO. Aunque el cambio climático tuvo su protagonismo el pasado noviembre en la Cumbre del Clima de Marrakech , en Marruecos, no hay duda que la discusión sobre cómo combatir los gases de efecto invernadero que ponen en riesgo la subsistencia en el planeta Tierra, y también el modelo económico que hemos mantenido durante más de un siglo, se convirtió en carta de la mayoría de las cumbres regionales y mundiales.
Desde la IV Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), celebrada en Ecuador en enero de 2016 y cuya presidencia pro tempore está en manos de República Dominicana –donde se realizará su próximo encuentro este 25 de enero-, hasta Cumbre de alcaldes C40, el pasado diciembre, se trató desde distintos ángulos y prioridades.
Por supuesto que su principalía no dejó de un lado otros asuntos de relevancia y preocupación regional y mundial. La crisis venezolana, los lazos renovados entre Cuba y Estados Unidos, las negociaciones de paz en Colombia con la guerrilla de las Farc, el terrorismo, la crisis de refugiados y las discusiones y preocupaciones contra el proteccionismo económico mantuvieron a los representantes de los gobiernos y potencias ocupados.
Y en noviembre se agregó también una realidad que fue tratada en estos conclaves como una preocupación: Donald Trump, quien será juramentado en menos de tres semanas como presidente de los Estados Unidos. Un acontecimiento que terminó atravesando de incertidumbre todos los temas transcendentes, incluyendo el cambio climático.
IV Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac)
Celebrada en Ecuador entre el 26 y 27 de enero en Ecuador, se enmarcó en la necesidad de fortalecer la economía regional, además de fortalecer los espacios regionales para los países de América Latina, al punto de que el presidente del país anfitrión, Rafael Correa, expresó su deseo de que la Celac sustituya a la Organización de Estados Americanos (OEA) que “jamás funcionó adecuadamente, pero que hoy es más anacrónica que nunca”.
También se expresó el apoyo al proceso de negociaciones de paz entre el gobierno colombiano y las guerrillas de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc), que en ese momento se encontraba en procesos de discusiones en mesas de diálogo en la Habana, Cuba.
En cuanto al cambio climático, se planteó el esfuerzo “para considerar su posible firma, ratificación y adhesión, y efectiva implementación” al Acuerdo de París, firmado en diciembre de 2015, pero con una advertencia que se hizo sentir luego en la Cumbre del Clima en Marruecos, instando a “los países desarrollados a asumir el liderazgo en la respuesta global al cambio climático y, asimismo, a cumplir los compromisos de provisión de medios de implementación a los países en desarrollo, en particular en materia de financiamiento, transferencia de tecnología y construcción de capacidades. De los 33 países del Celac, Nicaragua no forma parte del Acuerdo de París
Cumbre del G7
Es una cumbre que inició desde la década de 1970 y reúne a las que se consideran las siete potencias mundiales: Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Italia, Japón y Reino Unido. Por una época se convirtió en el G8 al incluir a Rusia, pero en el 2008 este país fue sacado del foro luego de la anexión de la península de Crimea.
En 2016, esta cumbre se celebró en Japón durante el mes de mayo. Como en otras ocasiones, el tema económico fue el relevante, pero desde un componente no agendado asumido como desfavorecedor y que terminó por hacerse realidad al mes siguiente: el Brexit, la salida de Reino Unido de la Unión Europea.
“La salida de Reino Unido de la Unión Europea revertirá la tendencia hacia un mejor comercio e inversión globales y los empleos que esto conlleva, y es un grave riesgo añadido al crecimiento”, se indicó este foro en un comunicado al final de la reunión.
Cumbre Humanitaria Mundial
Fue la novedad de las cumbres este año, la recién nacida. Realizada en Estambul, Turquía, cuatro días antes que la del G7, buscó poner en la agenda mundial un tema que desde el inicio del conflicto sirio empezó a ser una preocupación que atravesó las fronteras europeas de manera masiva: los refugiados.
“Estamos aquí para diseñar un nuevo futuro. Hoy declaramos: Somos una única humanidad con una responsabilidad compartida. Vamos a resolver aquí y ahora no sólo cómo mantener vivas a las personas, sino cómo darles la oportunidad de vivir con dignidad”, declaró Ban Ki-moon, el hasta hoy secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
El Secretario General insistió en la necesidad de aplicar la Agenda que ha preparado para esta Cumbre, basada en cinco responsabilidades básicas, la primera de ellas: prevenir los conflictos
Una de las principales decepciones fue la ausencia de los principales líderes mundiales. De los 172 países que participaron, solo 55 jefes de Estado o de gobierno (frente a los 150 en la COP21 en París) se presentaron. De estos, solo Angela Merkel representaba a una de las grandes potencias. Ni Barack Obama, ni David Cameron, ni François Hollande asistieron. El presidente Vladimir Putin, quien tampoco estuvo presente, criticó la cita que aseguró “ha ignorado el punto de vista de los Estados”.
También Médicos Sin Fronteras (MSF) decidió no acudir argumentando que “se niega a reforzar las obligaciones de los Estados.
VII Cumbre de la Asociación de Estados del Caribe (AEC)
A principios de junio, la cita fue en La Habana. Los países del Caribe trataron el comercio interregional, fomentar el turismo multidestino, aumentar las acciones de protección al medioambiente, y garantizar la paz en la zona.
Sin embargo, el anfitrión Raúl Castro puso en el centro del debate la situación de crisis en Venezuela y Brasil, que en este último país terminó con la destitución de la presidencia de Dilma Rousseff, señalando como causa de estas situaciones a “un ataque imperial contra los gobiernos progresistas”.
Fuera del tema político, fue en esta cumbre en la que los países del Caribe asumieron el tema del cambio climático con amplitud, exponiendo como uno de los retos de esta región la posibilidad de que en unos años podría afectar las costas de muchas islas y amenazar su subsistencia.
El bloque está conformado por Antigua y Barbuda, Bahamas, Barbados, Belice, Colombia, Costa Rica, Cuba, Dominica, El Salvador, Granada, Guatemala, Guyana, Haití, Honduras y Jamaica. También por México, Nicaragua, Panamá, República Dominicana, San Cristóbal y Nieves, Santa Lucía, San Vicente y las Granadinas, Surinam, Trinidad y Tobago, y Venezuela
El acuerdo histórico del cambio climático
Sin ser una cumbre, se convirtió en uno de los momentos importantes de los acuerdos mundiales. Durante dos semanas, 195 logran un acuerdo para limitar el aumento de la temperatura del planeta. O sea, casi “el mundo entero” firmó el 22 de junio para ratificar el Acuerdo de París, que entrará en vigor en el 2020.
El acuerdo de París fija elevar el apoyo financiero para caminar hacia una economía baja en emisiones de gases de efecto invernadero, cuya sobreacumulación en la atmósfera por las actividades humanas ha desencadenado el cambio climático. A partir del 2020, según el acuerdo, se deberán movilizar 100,000 millones de dólares anuales. Uno de los destinos de estos fondos son los Estados con menos recursos puedan adaptarse al cambio climático.
XI Cumbre Europa-Asia (ASEM)
Los países de Europa y Asia planeaban centrar temas de economía y cooperación, además de las disputas de soberanía en el mar de China Meridional, pero los atentados en Niza (Francia), el 14 de julio, y el intento de golpes de Estado en Turquía, el 16 de julio, dejaron los temas, al menos a nivel mediático, fuera de la mesa.
Cumbre de Desarrollo Sostenible
Realizada en la ciudad de Nueva York, entre el 25 y el 27 de septiembre, tuvo una misión: la de ratificar los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), que se empezaron a redactar en 2014 y que desplazaban a los Objetivos del Milenio, que se convirtieron en metas si alcanzar.
Estos nuevos objetivos centra su atención nuevamente en el cambio climático, desde la línea de crear un desarrollo pensado en una economía sostenible o, dicho de otra manera, amigable con el medio ambiente y que logré también disminuir los efectos del cambio climático. Esperar que tengan mejor suerte que los del Milenio.
Cumbre del G20
Para septiembre también se reunieron los líderes del Grupo de los 20, un cita rutinaria como casi todas las cumbres anuales y que incluye a las 19 mayores economías mundiales y a la Unión Europea, en la ciudad china de Hangzhou. En este grupo participan Brasil, Argentina y México. El encuentro de dos días en la ciudad china de Hangzhoun un llamado a oponerse al proteccionismo.
XXV Cumbre Iberoamericana
En Cartagena, Colombia, se celebró en octubre la XXV Cumbre Iberoamericana, que aunque tuvo como eje central la juventud, el tema de las negociones de paz con las Farc fue el verdadero protagonista, mas cuando fue en esta misma ciudad donde se firmó el prime acuerdo el mes anterior, que no logró ser refrendado por el plebiscito realizado el 2 de octubre.
Los 22 jefes de Estado y de Gobierno firmaron una declaración final de 41 puntos entre compromisos e intenciones encaminados a mejorar la situación de los jóvenes iberoamericanos entre los 15 y 29 años, que son más educados pero que difícilmente encuentran oportunidades para el trabajo y el emprendimiento.
Cumbre del Clima de Marrakech (COP21)
El triunfo de Donald Trump empujó a unos 200 países reunidos este noviembre en la Cumbre del Clima de Marrakech, Marruecos, a lanzar mensajes sobre su compromiso contra el calentamiento, concretado en el Acuerdo de París. En esta cumbre principalmente se estableció la hoja de ruta para que los países firmantes del acuerdo presenten sus reglamentos sobre sus compromisos de disminución de gases de efecto invernadero para el 2018.
