Por: Ramón Antonio Veras.
Con posterioridad a la desaparición física del tirano Rafael
Leónidas Trujillo Molina, más precisamente en septiembre
de 1961, un grupo de jóvenes nos dirigimos a la única universidad existente en el país para esa época, la Universidad de Santo
Domingo, y procedimos a matricularnos en
la Facultad de Derecho.
Luego de cinco
años de estudios, el 25 de febrero de 1967,
fuimos investidos con el título de doctores (a) en derecho; una investidura que
debió realizarse en 1966, pero, por la
Guerra de Abril de 1965, se celebró
en 1967. Nuestra promoción ha sido identificada como la Promoción
de la Libertad, por haber sido la primera de la Facultad de Derecho en ser investida luego de la tiranía de Trujillo.
La unidad en la diferencia ha mantenido unidos a la
promoción de los investidos en derecho de la Universidad Autónoma de Santo
Domingo de 1967. Luego de graduados, algunos decidieron seguir la carrera
militar, policial, magisterial, sacerdotal empresarial, comercial; la
judicatura, la política, el periodismo, en fin, en nuestra promoción hay,
además de abogados y abogadas litigantes, miembros de distintas actividades en
la vida privada y pública.
Como una forma de mantener la unidad y la fraternidad,
los miembros de la promoción convenimos, en principio, reunirnos cada cinco (5)
años pero, al transcurrir el tiempo, decidimos efectuar un encuentro anual en
los días posteriores al de la conmemoración.
Al
momento de concluir cada actividad, escogemos
el lugar donde nos reuniremos el próximo año. En algunas ocasiones determinado
compañero decide ser el próximo anfitrión en su ciudad natal, como ocurrió en el
encuentro de 2013, en el cual invité a
los miembros de la promoción a reunirnos en Santiago.
El pasado 8 de marzo en curso, 2014, los miembros de la
Promoción de la Libertad, tuvimos la dicha de
nuevamente reencontrarnos, reiterarnos el cariño, los afectos que nos tenemos,
esta vez en Santiago, en un ambiente donde primó la alegría y la franca
camaradería.
Pasamos horas de
alegría, hicimos un balance de nuestras
vidas, de los gratos recuerdos transcurridos.
Los integrantes de la promoción de doctoras y doctores en derecho de la UASD,
1967, hace tiempo que dejamos de ser compañeros de estudios, amigos, amigas y
colegas; ya somos hermanos, así nos tratamos y nos queremos.
La política, la religión,
la distancia, el atraso o progreso económico no nos ha separado. La
comprensión, el respeto mutuo y la identificación han fortalecido la unidad de la Promoción de
la Libertad.
Los encuentros que efectuamos cada año sirven como
renovación de los indestructibles lazos
que en la franqueza y la tolerancia nos han mantenido unidos. Esa unidad fue
fortalecida con el encuentro del pasado sábado día 8 cuando nos volvimos a reunir para
celebrar el 47 aniversario de nuestra
investidura como profesionales del derecho.
Nuestro grupo es activo, dinámico, por eso ya tiene
fijado el próximo encuentro en la ciudad de San Cristóbal, acogiendo
ofrecimiento en ese sentido de los compañeros Ramón Puello Báez, Darío y
Francia Adames, donde volveremos a regocijarnos con la alegría que producen los
encuentros de las personas que han hecho de la amistad una manifestación de
amor y un alimento del espíritu.
Santiago de los
Caballeros,
